Que no has sentido por las noches algo que roza tu piel
(María Fernanda Rueda Mtz/Jose Avila Garcia)

Que no has sentido por las noches algo que roza tu piel
Poquito, poquito
Casi no lo sientes porque no quiero despertarte
Pero cada que la luz muere
Un beso mío llega hasta tus labios y se despide de ellos
Deseándote dulces sueños
Cuando sale la luna te veré aunque estés lejos
Y te deseare aunque estas oculta entre las ciudades
Y los campos que cubren la madrugada
Al calor de la noche siento tu calor pequeño
Y entre las estrellas veo tu resplandor
En tiempos como estos siento tu aroma por las mañanas
Cuando los cuervos han comido cada alma que queda la mía aun esta contigo dentro de tu alma
El frió que congela mis uñas decae con un pensamiento es que yo se que estas conmigo
Y cada noche, cuando la sombra anula lo visible y reduce mi universo a la secreta soledad pensante, recuesto junto a mi esa ansia reprimida que, todo el día, trató de ser palabra delante del fulgor de tu ausencia...
Y cada noche, cuando la sombra anula lo visible y reduce mi universo a la secreta soledad pensante, recuesto junto a mí esa ansia reprimida que, todo el día, trató de ser palabra delante del fulgor de tu ausencia...:
Y con ella a mí lado invento el cauce puro del más puro silencio para dejar que exprese y desahogue su idioma contenido que brota de los dos al mismo tiempo
Y en dialogo desnudo consolarnos dejando en libertad la noctámbula fuerza enmudecida de un misterioso amor inconfesado

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